Relaja los músculos y alivia calambres, espasmos y dolores musculares.

Mejora la calidad del sueño al regular los ritmos circadianos.

Fortalece los huesos al favorecer la absorción de calcio y magnesio.

Ayuda a regular la presión arterial alta.

Mejora la digestión y alivia el estreñimiento o el síndrome del intestino irritable.

Reduce el estrés y la ansiedad al equilibrar los niveles de cortisol.

Potencia la función cerebral, mejorando la memoria y la concentración.

Apoya la salud cardiovascular, reduciendo el riesgo de enfermedades del corazón.